por Pascale JUILLIARD / Raphaëlle PICARD / AFP
Estos son los principales momentos de la historia del pueblo judío, desde el exilio hasta la creación del Estado de Israel.
– La diáspora –
Roma conquista Judea en el año 63 a. C. La población lleva a cabo dos revueltas, pero son sofocadas. La primera, en 66, provoca el asedio de Jerusalén y la destrucción de su templo. En la segunda, en 132, se destruye la ciudad y buena parte de la población es masacrada. Se prohíbe la entrada de los judíos en Judea y muchos emigran a la vecina Galilea y a otras zonas del imperio romano.
Hacia el final del imperio (476), el cristianismo es la religión dominante. La comunidad judía, próspera en el Mediterráneo, sufre persecuciones de los visigodos y en el imperio bizantino.
En el siglo VII comienza la conquista árabe con el nacimiento del islam. Al comienzo, los árabes toleran a los judíos. Jerusalén se convierte en un lugar santo para las tres religiones monoteístas.
Los árabes conquistan la península ibérica en 711. Los judíos representan el 5% de la población y comienza una edad dorada para ellos. Se asientan en el resto de Europa occidental y son objeto de tolerancia.
– Persecuciones en la Edad Media –
En 1095, los cristianos de Europa organizan cruzadas para liberar Tierra Santa. A su paso masacran a judíos, a quienes consideran deicidas.
En el siglo XII, el papado defiende a los judíos pero los monarcas consideran que suponen un problema. En 1182, Felipe II de Francia (el Augusto) pasa a ser el primer rey del país en expulsarlos.
Se les acusa de todos los males. Algunos comparecen ante los tribunales de la Inquisición que persiguen a los herejes y a las brujas. Cuando en 1347 aparece la peste negra, se les culpa de haber envenenado los pozos. Son perseguidos y expulsados progresivamente.
Carlos VI expulsa a todos los judíos de Francia el 4 de noviembre de 1394.
En España la Reconquista termina en 1492. Los reyes católicos ordenan a los judíos convertirse o marcharse. Una parte de ellos se va al imperio otomano.
– Pogromos y caso Dreyfus –
Después de la Revolución, Francia es el primer país en Europa en votar, en 1791, una ley de emancipación que otorga a los judíos igualdad de derechos con los otros ciudadanos.
El antisemitismo resurge en el siglo XIX, sobre todo en Europa del Este donde vive la mayor comunidad judía del mundo. En el imperio ruso los judíos son blanco de ataques llamados pogromos, sobre todo en 1881-84. Muchos judíos emigran a América del Norte y durante el trayecto algunos se quedan en Europa central y occidental. En mayo de 1882, la Rusia zarista adopta una legislación sistemáticamente antijudía, la más dura hasta entonces y hasta el ascenso al poder de Adolf Hitler.
En Francia, en 1894 el capitán Alfred Dreyfus, un oficial judío, es condenado injustamente, acusado de traición en provecho de Alemania, un caso que conmociona al país. Es deportado a la Isla del Diablo, en la Guayana francesa, y rehabilitado en 1906.
– Sionismo –
El sionismo, un movimiento nacido en el siglo XIX con el objetivo de juntar a los judíos en Palestina, cobra un cariz político cuando en 1896 el periodista vienés Theodor Herzl publica “El Estado judío. Ensayo de una solución moderna a la cuestión judía”. En el primer congreso en Basilea en 1897, Herzl hace una profecía: “Dentro de 50 años nacerá un Estado judío”.
El antisemitismo y los pogromos aceleran la llegada de los judíos en Palestina, por aquel entonces una provincia del imperio otomano. En 1900 había 50.000, el doble que en 1880.
Los británicos apoyan “el establecimiento en Palestina de un hogar nacional para el pueblo judío”, en una declaración del 2 de noviembre de 1917 firmada por el ministro de Relaciones Exteriores Arthur Balfour.
Los judíos representan entonces menos del 10% de la población de Palestina. Este texto es la semilla del conflicto israelo-palestino.
– Holocausto –
El exterminio de los judíos por los nazis en Europa en 1939-45 causa seis millones de muertos, más de un tercio de la población judía de aquella época.
Después de la llegada al poder de Adolf Hitler en 1933, se les persigue, especialmente en Alemania y Austria. Muchos judíos acaban encerrados en guetos (sobre todo en Varsovia) en los que pasan hambre. A medida que los nazis arrebatan territorio al Ejército Rojo se producen ejecuciones masivas.
A partir de 1941, comienza la aplicación de “la solución final de la cuestión judía” preparada por Heinrich Himmler: el exterminio de los judíos en campos de concentración mediante cámaras de gas.
Todos los países ocupados o aliados con el Tercer Reich deportan a los judíos a estos campos, con la excepción de Dinamarca, cuyo rey se pone la estrella judía a modo de desafío, y de Bulgaria.
– Creación de Israel –
La ONU vota el 29 de noviembre de 1947 la partición de Palestina en dos Estados, judío y árabe. Jerusalén queda bajo control internacional.
Este plan, rechazado por los países árabes, provoca un estallido de violencia entre árabes y judíos.
El 14 de mayo de 1948, David Ben Gurión proclama el Estado de Israel tras 28 años de mandato británico.
Al día siguiente cinco países árabes entran en guerra contra el nuevo Estado. Esta primera guerra israeloárabe termina en 1949 y permite a Israel extender el territorio que le había atribuido la ONU.
Más de 760.000 palestinos se ven obligados al éxodo o a huir y unos 160.000 se quedan en el nuevo Estado. Los árabes israelíes constituyen actualmente el 17,5% de la población.
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