Por Yulith Almenarez
Cuando ya se había surtido el trámite de los impedimentos, y cuando la plenaria se disponía a votar las objeciones a la JEP, presentadas por el presidente de la República Iván Duque, el presidente del Senado Ernesto Macías sacó un As bajo la manga para dilatar nuevamente la votación. Se trata de la recusación a los senadores Ivan Cepeda y Roy Barreras. El primero por el contrato que tiene su esposa en la G y el segundo por haber participado en las negociaciones de paz. Pero lo más inverosímil de las recusaciones, tiene que ver con el hecho de que estos dos senadores han opinado por sus redes sociales en favor de negar las objeciones. Esto dio pie a un gran debate, que hasta ahora se mantiene, dado que muchos senadores se pronunciaron al respecto. Dicen que prohibir la libre opinión y la libertad de los parlamentarios para tomar partido en los diferentes temas, sería como aplicar la censura en el Congreso de la República.
De inmediato el senador Roy Barreras recusó al presidente del congreso Ernesto Macías y al expresidente Álvaro Uribe argumentando que, el primero había presentado una tutela para tumbar la votación de la cámara de representantes en favor de negar las objeciones, y el segundo por haber liderado la campaña por el NO.
El senador Cepeda, por su parte, dejó claro ante la plenaria que el cargo que tiene su esposa en la JEP no tiene, en lo absoluto, ninguna relación directa que implique conflicto de interés en alguno de los artículos objetados por el Presidente Duque.
El país está en vilo por las constantes dilaciones a la votación en el Senado.
Finalmente la plenaria fue aplazada para mañana 30 de abril, mientras la Comisión de Ética del Senado resuelve de fondo las recusaciones.