Por Nicolás Rodriguez
El general (R) Mario Montoya, excomandante del Ejército Nacional de Colombia, tendrá que comparecer ante la Jurisdicción Especial para la Paz, por las “muertes ilegítimamente presentadas como bajas en combate por agentes del Estado”, solicita la JEP.
Por primera vez, el excomandante Mario Uribe rendirá versión ante los magistrados de la Sala de Reconocimiento de Verdad de la JEP, dentro del caso 03, el cual tiene 215 versiones, 169 versiones orales y 46 escritas, sobre las muertes ilegitimas presentadas en combate.
Ante la presencia de 41 víctimas y 15 representantes judiciales, el general Mario Uribe tendrá que responder por las once versiones rendidas por otros miembros de la fuerza pública de menor rango, que lo responsabilizan y vinculan a los mal llamados falsos positivos durante los gobiernos de Álvaro Uribe.
Desde hace varios meses, el general tiene a su disposición los informes y testimonios en los que fue nombrado, para defenderse de los cuestionamientos de los magistrados y los abogados de las víctimas, quienes también tendrán la oportunidad de preguntarle al compareciente sobre los temas tratados.
De acuerdo a la Ley Estatutaria de la JEP, quienes se someten a esta jurisdicción están obligados a aportar verdad plena, narrar de manera detallada sobre las conductas cometidas y circunstancias de los hechos a los que están comprometidos, para atribuir responsabilidades y garantizar la satisfacción de los derechos de las víctimas.
Montoya no solo es señalado por propiciar los casos relacionados con las ejecuciones extrajudiciales, sino también por sus presuntos vínculos con paramilitares y las decenas de asesinatos y desapariciones cometidos durante la Operación Orión, en la comuna 13 de Medellín.