Bajo el nombre de ‘Operación Bastón’, la revista Semana reveló uno de los más grandes operativos de contrainteligencia al interior del Ejercito Nacional, que dejo al descubierto graves hechos de corrupción en la institución castrense. Los hallazgos son sorprendentes: altos mandos militares vendían información y hacían negocio los con grupos al margen de la ley.
Con el objetivo de identificar y sancionar las manzanas podridas dentro Ejercito Nacional, la inteligencia militar fundó la ‘Operación Bastón’, denominada así por los bastones de mando que son símbolo de los generales y de aquellos altos oficiales que son objeto de estas investigaciones.
De acuerdo a las investigaciones, en más de cinco gigas de información que contiene 57.538 documentos, entre contratos, videos, entrevistas y toda una serie de elementos que respaldan la información, se estableció que, por lo menos, 16 generales, 218 oficiales y 122 suboficiales del Ejército estarían involucrados en actos de corrupción.
Mientras un general le vendía información a las Farc y luego a las disidencias. Otro hacía negocios con narcos del Clan del Golfo. Y varios oficiales andaban en alianzas con integrantes de la estructura sicarial conocida como la Oficina de Envigado.
Las investigaciones surgieron a partir de las recomendaciones que le hizo Organización del Tratado del Atlántico Norte (Otan), a Colombia como requisito para que entraran a formar parte de la instancia militar internacional como socio.
A medidas que iban avanzando las pesquisas y se iba filtrando información, algunos oficiales del Ejército decidieron emprender una cacería de brujas a quienes seguían adelantaban las labores de contrainteligencia, a fin de impedir el avance de las investigaciones y sacar a sus rivales del camino.
En medio del escándalo por las interceptaciones ilegales, los resultados de Operación Bastón desataron un tenso debate en el Congreso de la República. El senador del Polo Democrático aseguró que estos hechos “no se puede seguir considerando como un tema de ‘manzanas podridas’”. Por su parte, el senador Gustavo Bolívar, de la Lista de la Decencia, crítico la actitud del congreso frente a la aprobación del ascenso de los generales, que estarían implicados en este escándalo, en la legislatura pasada.
El ministro de Defensa, Carlos Holmes Trujillo, anunció que las investigaciones en curso seguirían y servirán para realizar cambios internos en el Ejército. Y agregó que las denuncias serán remitidas a autoridades correspondientes.
Sin embargo, según reveló Semana, en la Fiscalía los expedientes reposan en el olvido, y no hay determinaciones frente a los responsables de esta red de corrupción en el Ejercito