Recientemente se conoció que varios guardias del Inpec intentaron meter a la cárcel botellas de licor de contrabando durante las celebraciones de fin de año, al parecer para venderlas a los reclusos por valor de hasta 5 millones de pesos.
Así lo dio a conocer la Unidad Investigativa del Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (Inpec), creada hace unos meses para detectar casos de corrupción dentro de la institución, revelando que en prisiones como La Picota (Bogotá), guardias ofrecieron botellas de whisky por exageradas sumas de dinero.
“Dentro de las informaciones que nos llegaron la semana pasada es que había algunos guardianes que querían ofrecer licor a los internos y los precios oscilaban entre $4 y $5 millones por una botella de whisky” informó al Espectador el director encargado del Inpec, el coronel Daniel Gutiérrez.
El funcionario informó que, en cuanto se conoció la información de este nuevo escándalo, “estamos investigando quiénes son los que estaban tratando de hacer esa modalidad de contrabando para empezar a hacer las sanciones”.
Gutiérrez también aseguró que además de este grave hecho se han encontrado varias irregularidades al interior de los penitenciarios por parte de los funcionarios del Inpec
“Estamos revisando que hay personas privadas de la libertad que son de nivel 1 de seguridad y que se encontraban en pabellones que no son de alta seguridad. Hicimos una reubicación de esas personas. Hemos encontrado malas prácticas de algunos internos como que todo lo que pasa ahí lo cobran. Por ejemplo, llega un interno nuevo y lo ponen a hacer aseo, lo cobran por el planchón, le cobran por el espacio de una celda” dijo el funcionario.
Cabe recordar que el Inpec ha estado envuelto en diferentes polémicas en los últimos meses, una de las más sonadas fue la revelación de los diferentes beneficios que gozaba el polémico empresario Carlos Mattos, condenado por el caso Hyundai.