En medio de una entrevista en el programa de La Luciérnaga de Caracol Radio el hoy candidato presidencial Rodolfo Hernández arremetió, muy a su estilo, contra los funcionarios judiciales.
En su intervención en la cadena radial Hernández dijo que “La justicia en Colombia es un chiste” y que los togados no cumplen con su labor, aseguró que “hay que ponerle tiempos de respuesta a los jueces” y señaló que los funcionarios de la rama judicial se la pasaban “la mayoría de tiempo, comiendo y no cumpliendo con las labores que les correspondía”.
“No puede ser que, con miles de procesos en el escritorio, -los jueces- llegan a las 10 de la mañana, se van para la tienda a comer morcilla y papas chorriadas, vienen las 12, atienden dos cositas, vuelven y se van, llegan a las 3, a las 4 están en la tienda comiendo arepa de huevo y gaseosa Kola Hipinto y vuelven y se van”, criticó Rodolfo Hernández.
Sus polémicas declaraciones desembocaron la crítica tajante de los funcionarios judiciales, quienes protestaron por la manera en que el candidato desconoció sus funciones. “Exigimos respeto por nuestra labor”, manifestaron y afirmaron que Rodolfo Hernández demuestra “craso y total desconocimiento de nuestras funciones”.
“Se encuentra totalmente desinformado cuando, de manera prosaica, recrea una escena absolutamente grosera y grotesca que solamente se encuentra en su imaginación, a cambio de haberse informado sobre cuántos procesos conoce cada juez en cada país”, le reprochó la jueza y presidenta de Asonal Judicial, María del Pilar Arango
A su vez refutó uno de los comentarios en los que el ingeniero aseveró que a los jueces nadie los audita ni los vigila. “Por si fuera poco, de manera folklórica manifiesta públicamente que nadie nos audita. Ni siquiera se toma el trabajo de informarse cuántas acciones penales, disciplinarias y administrativas nuestros entes de control ejercen sobre nosotros”, aseveró Arango.
Sumado a lo anterior la togada, en nombre de jueces y funcionarios, aseguró que el candidato olvidó que en Colombia también existen magistrados de familia, laborales, civiles, administrativos, disciplinarios, entre otros. “Es una afrenta más contra la dignidad de la justicia. No soportamos más ataques”, concluyen.