El grave ambiente de represión que pone en riesgo a los jóvenes de la “Primera Línea”, llevó a que unos de sus integrantes acudieran a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, (CIDH), en busca de medidas cautelares.
Se trata de un grupo de jóvenes que hacen parte de los “Escudos Azules”, uno de los primeros grupos de esta clase que se formó en Bogotá en el año 2019, y que hoy, ante el evidente riesgo, recurren hasta esta instancia internacional para proteger sus vidas.
“Quieren silenciarnos porque les incomodan nuestras voces”, dijo unas de las voceras de la primera línea que acudió a la CIDH, al diario El Espectador.
Según los integrante de los Escudos Azules, desde que se formó el grupo, tras el tras el asesinato del joven manifestante Dilan Cruz, han sido víctimas de persecuciones judiciales, montajes, estigmatización y criminalización por parte de las autoridades.
Por esa razón, radicaron de manera formal la petición ante la CIDH, con la ayuda de la Fundación Nydia Érika Bautista, una entidad reconocida por representar a víctimas del desaparición forzada y por la defensa de los Derechos Humanos.
“Los Escudos Azules y otras primeras líneas son tratadas como grupos criminales y algunos han sido judicializados como grupos armados”, explicó Yanette Bautista, directora de la Fundación Nydia Érika Bautista.
En el documento que radicaron ante el organismo internacional, detallan cada uno de los eventos en los que sus miembros han víctimas de la represión estatal.
*Con información del diario El Espectador.