Por EFE
El presidente de Colombia, Iván Duque, presentó hoy en Ginebra ante la conferencia anual de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) los planes de su Gobierno para adaptar el mercado laboral a los retos tecnológicos del siglo XXI, con la meta de crear 1,6 millones de empleos hasta 2022.
“Queremos llegar a una tasa de desempleo que esté por debajo del 8 por ciento, la más baja de las últimas tres décadas en Colombia“, afirmó Duque en la conferencia extraordinaria, con la que se celebra el centenario de la organización con sede en Ginebra.
El presidente colombiano reconoció que uno de los retos en su país es luchar contra el desempleo juvenil, con unas tasas especialmente altas en relación con la media latinoamericana, y para ello se ha hecho “una gran apuesta por la educación” destinando el mayor presupuesto de la historia nacional a ese sector.
Se ha fijado en ese sentido la meta de duplicar la jornada única escolar y que en los tres últimos años de la enseñanza secundaria se brinde también formación para la búsqueda del empleo con el objetivo de que “cuando se gradúe un bachiller, en una mano tenga ese título y en la otra uno de técnico preparado para el empleo”.
El actual Gobierno de Colombia, que Duque asumió hace diez meses, quiere introducir la enseñanza de capacidades adaptadas a la cuarta revolución industrial, como “el análisis integrado de datos o la programación, pensando en las demandas que está teniendo el mercado laboral”, explicó.
Para adaptar Colombia, como el resto del mundo, a un siglo con cada vez mayores retos en el campo del trabajo, debe “buscarse el sano equilibro entre el emprendimiento y la mejora de las condiciones de nuestra fuerza laboral”, subrayó Duque.
Por ello, destacó, él ha sido el primer presidente colombiano que se sentó junto a empresarios y sindicatos en la mesa de concentración laboral con el fin de firmar un “pacto por el trabajo decente”, anunciado en septiembre de 2018 y que “constituye un hito, porque sector privado, Estado y trabajadores fijamos metas comunes”.
Duque recordó que Colombia fue miembro fundador de la OIT en 1919, organización nacida a la lumbre de las conversaciones de paz tras la Primera Guerra Mundial, y que su país, como el resto, enfrenta los retos de la transformación tecnológica que plantean fenómenos como la robotización o la inteligencia artificial.
Tales fenómenos generan “presión y desafíos permanentes”, por lo que es importante que “los países adecúen sus políticas e iniciativas de tal manera que la fuerza laboral sea triunfadora y vencedora en el marco de las transformaciones tecnológicas”, declaró.
Colombia, proclamó, “se une en la causa de lograr la erradicación total del trabajo infantil, conseguir la dignificación que se requiere para todo mercado laboral y que el trabajo forzado también deje de existir sobre la faz del planeta”.
La conferencia anual de la OIT, del 10 al 21 de junio, analiza los retos de los trabajadores del futuro y en ella también han participado el presidente de Francia, Emmanuel Macron, y la canciller alemana, Angela Merkel, entre otros mandatarios.