Nuevo hecho de violencia se registró en el barrio Llano Verde en donde habitaban los cinco menores masacrados el pasado martes en Cali.
Este jueves 14 de agosto, hubo una detonación de una granada a pocos metros de donde se congregaba los familiares y allegados para velar los cuerpos de los jóvenes asesinados en un cañaduzal en la capital del Valle. El estallido dejó un saldo de una persona muerta y 15 personas heridas entre ellas un bebé de 10 meses.
Según las voces de quienes estaban en el lugar de los hechos, el artefacto explosivo fue lanzado frente al CAI de policía.
El alcalde de Cali, Jorge Iván Ospina se presentó en el lugar de los hechos para acompañar a la comunidad en el duelo. Adicionalmente, indicó que las investigaciones estarán orientadas a determinar si existen nexos entre el atentado y la masacre de los jóvenes.
Hasta el momento, la zona se encuentra custodiada en un trabajo conjunto entre la Policía Nacional, el Ejército y funcionarios de la Alcaldía de Cali.