La ciudadanía colombiana promueve distintas iniciativas para proteger los páramos y nevados de la deforestación, la ganadería extensiva, los cultivos ilícitos y de la explotación minera.
La primera estrategia en conocerse fue la de los mandatarios Claudia López, alcaldesa de Bogotá; Carlos Caicedo, gobernador del Magdalena y Juan Carlos Cárdenas, alcalde de Bucaramanga quienes junto al ambientalista Carlos Sotomonte promueven una solicitud ante la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco)para que “declare a los 36 páramos existentes en el país como patrimonio natural de la humanidad y reserva de biósfera”. La iniciativa resalta la relevancia vital y la extraordinariedad geográfica de los páramos de Sumapaz, Santurbán y la Sierra Nevada de Santa Marta.
Por otro lado, tras una tutela interpuesta por el ciudadano Juan Felipe Rodríguez Vargas, el Tribunal Superior de Ibagué declaró al Parque Nacional Los Nevados como “sujeto especial de derechos” con esta decisión jurídica se busca proteger este recinto natural de las actividades industriales, agrícolas, de la caza indiscriminada a las especies que lo habitan y además, garantizar su recuperación, conservación y mantenimiento.
A estos adelantos en materia ambiental se suma un plan que se llevará a cabo entre los campesinos y el gobernador de Boyacá, el cual busca liberar y reforestar 175 hectáreas alrededor del páramo El Rabanal. El proyecto consiste en darle un subsidio a 71 familias campesinas que habitan en la zona para que sustituyan cultivos con especies nativas o amigables con la vegetación del páramo y la plantación agrícola se hará bajo asesoría técnica para que su producción no afecte el ecosistema.
Todos estos proyectos buscan atender las demandas ciudadanas que cada vez son más conscientes de la importancia de blindar estos ecosistemas productores de agua de los intereses económicos y de cara a la crisis climática mundial.