El Congreso de Chile aprobó este jueves una reforma que permite realizar un plebiscito para decidir si se redacta una nueva Constitución, una de las demandas de las protestas callejeras que se desataron hace dos meses.
El proyecto, aprobado por 38 votos a favor y tres en contra, habilita un plebiscito el próximo 26 de abril para que los votantes decidan si quieren una nueva Constitución y qué tipo de órgano debería redactarla: una Convención Mixta Constitucional -integrada por congresistas, representantes políticos y de la ciudadanía- o una Convención Constitucional, similar a una asamblea constituyente y donde todos los integrantes son elegidos en una votación.
“Este es un triunfo histórico e importante de la democracia chilena”, dijo Jaime Quintana, presidente del Senado y del opositor Partido Por la Democracia (PPD, izquierda).
El Congreso aprobó la reforma luego de que los senadores oficialistas y opositores alcanzaran un acuerdo para establecer las reglas del plebiscito el 15 de noviembre, en medio de las violentas protestas que han dejado 24 muertos, miles de heridos y acusaciones de violaciones de los derechos humanos contra las fuerzas del orden.
– Paridad de género –
En tanto, la Cámara de Diputados aprobó la noche del jueves una reforma para garantizar la igual participación de hombres y mujeres si en el plebiscito de abril se aprueba la formación de una Convención Constituyente como órgano para cambiar la Carta Magna.
También se aprobaron escaños reservados para candidatos indígenas e independientes, indicó un comunicado de la Cámara Baja.
Ambas cámaras habían rechazado previamente un reclamo para que el órgano que redacte una nueva Constitución tuviera paridad de género e incluyera a independientes e indígenas, pues los legisladores conservadores argumentaron que ello no era parte del acuerdo que permitió la aprobación del plebiscito.
Incluso, la Cámara de Diputados aprobó la reforma el miércoles en medio de una inusitada protesta feminista, que ingresaron al hemiciclo en medio de gritos para exigiendo cupos igualitarios.
Pero un grupo transversal de diputados, en su mayoría mujeres, reinstalaron el jueves estos reclamos con nuevos proyectos de ley que fueron aprobados en la noche tras un acuerdo entre las bancadas, con 141 votos a favor y uno en contra.
Tras la aprobación, diputados opositores y varios oficialistas rompieron en un cerrado aplauso y gritos de algarabía.
“Hoy día estamos haciendo justicia con miles de mujeres que en Chile han estado calladas, hoy día estamos haciendo justicia con ellas”, dijo la diputada Marcela Sabat, del oficialista partido Renovación Nacional (RN).
Ahora, los proyectos deberán pasar al Senado, que en enero los someterá a votación para su aprobación final, indicó un comunicado de la Cámara de Diputados.
– Una Constitución en democracia –
El clamor por una nueva Constitución que reemplace la actual Carta Magna heredada de la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990) volvió a tomar fuerza en medio de las protestas iniciadas el 18 de octubre pasado, cuando estalló en el país la peor crisis desde el retorno a la democracia.
“Luego de 40 años se abre camino a una nueva Constitución hecha en democracia (…) El pueblo se manifiesta en las calles y se ha manifestado por una nueva Constitución”, afirmó la senadora Isabel Allende.
La reforma aprobada permite cambios al capítulo XV de la Constitución de Pinochet, que no contempla la figura del plebiscito.
El fin de semana pasado, más de dos millones de electores votaron en una consulta no vinculante en unos 225 municipios expresando un rotundo 92,4% a favor de una nueva Constitución. Un 73,1% votó porque sea redactada por una Asamblea Constituyente, en contra de la postura de gran parte de la dirigencia de derecha, que desea una Convención Mixta que incluya a los actuales miembros del Congreso.
La Asociación de Municipios de Chile decidió realizar esa consulta en un esfuerzo por destrabar la crisis social que no cede en un país que hasta octubre era considerado uno de los más estables de la región, junto a Uruguay.