La alcaldesa Mayor de Bogotá, Claudia López, reiteró su compromiso en contra del maltrato animal y anunció una serie de medidas para desincentivar las corridas de toros en la capital del país, de cara a la temporada taurina 2020, que iniciará el próximo domingo 2 de febrero e irá hasta el primero de marzo.
“Bogotá no quiere corridas de toros, pero respetamos la ley. Esta no nos permite detener la temporada taurina porque la administración de Peñalosa firmó el 13 de diciembre de 2019 un contrato hasta el 31 de agosto de 2020. Dentro del marco legal y cultural vamos a desincentivar los espectáculos taurinos en la ciudad mientras encontramos una solución definitiva a este tipo de prácticas que ya debieron desaparecer en Colombia”, señaló la alcaldesa de Bogotá, Claudia López.
‘Mi Fiesta No Brava’, llena de programación cultural
La alcaldesa anunció que paralelo a la temporada taurina la ciudad contará con toda una programación cultural gratuita denominada ‘Mi Fiesta No Brava’, que incluye una amplia oferta cultural y artística, en rechazo legítimo y pacífico a las corridas.
La propuesta cultural enfocada en el rescate y visibilización de los “pagamentos”, costumbre ancestral a través de la cual por principio de reciprocidad se ofrece una retribución a la naturaleza por todo lo que da. En este caso, es un agradecimiento por la vida del toro, atendiendo los reconocidos rituales indígenas.
A esta fiesta se unirán las más de 50 organizaciones animalistas con su programación que incluye obras de teatro, bailes performance y muestras de cine, con el propósito de propender un mensaje a favor de la vida y protección de los animales.
Como parte de estas medidas, la alcaldesa Claudia López indicó que la Administración Distrital apoyará decididamente el proyecto de acuerdo de la concejala animalista, Andrea Padilla, que busca desincentivar las prácticas taurinas, aumentando los costos de la realización de las corridas, y mayores exigencias a sus organizadores.
Este proyecto incluye una obligación de que se reserve el 30 % del espacio de la publicidad del evento para informar del sufrimiento animal; además de prohibir el consumo de alcohol, entre otras medidas.
“El Acuerdo nos permitirá contar con más mecanismos legales para desincentivar de manera integral los espectáculos taurinos. También pediremos a la bancada verde en el Congreso de la República que legisle de fondo sobre la materia y apoye la prohibición de las corridas de toros en todo el país”, indicó la alcaldesa.
Además, se reducirá el perímetro que antes se utilizaba para el cerramiento alrededor de la plaza: Esta vez por la carrera 5 de la calle 26C hasta la calle 31; la Carrera 7 entre calles 26 y 28; en el costado norte se permitirá flujo vehicular por la calle 28; en el sector occidental se habilitará flujo vehicular por carrera 13 y no se interrumpirán las otras actividades normalmente planeadas en los horarios de las corridas.
¿Por qué Medellín pudo prohibir las corridas de toros y Bogotá no?
La alcaldesa se refirió al caso de Medellín, donde el alcalde Daniel Quintero, prohibió las corridas hasta el 2023. Recordó que el municipio es dueño del 49 % de la plaza la Macarena y el otro 51 % está en manos de una empresa privada que puede decidir qué espectáculos promover o no, y la logran financiar con otras actividades.
“Allí los socios privados tienen la última palabra y afortunadamente ellos coincidieron con la voluntad del alcalde de alquilar la plaza para otro tipo de espectáculos. En Bogotá, al contrario, la plaza es 100 % pública, y por ello nos vemos obligados a cumplir las sentencias, hasta que una Ley de la República ordene lo contrario”, indicó la alcaldesa.
Finalmente, la alcaldesa, Claudia López, hizo un llamado a taurinos y antitaurinos a seguir trabajando por la sana convivencia, a aprender a convivir y a expresar las diferencias en paz, a pesar de las emociones y la consternación que genera a muchos por el sacrificio y el sufrimiento de los toros.