En el marco del proceso judicial que enfrenta el expresidente Álvaro Uribe por los delitos de soborno de testigos y fraude procesal, al parecer la Fiscalía sigue trabajando en estrategias para dilatar el caso y favorecer al exmandatario.
Y es que, bajo la dirección del nuevo fiscal a cargo del caso, Gilberto Iván Villareal Pava, se han levantado sospechas de que la Fiscalía busca alargar el proceso para acercarlo al vencimiento de términos, siguiendo un patrón similar al de sus antecesores. A pesar de las conclusiones judiciales que indican la falta de razón para precluir a favor de Uribe, la Fiscalía ha persistido en pedir el archivo del caso.
Según reveló este martes el Reporte Coronel, recientemente, la Fiscalía llamó silenciosamente a declarar al exjefe paramilitar Salvatore Mancuso, con la aparente intención de favorecer al expresidente Uribe. Sin embargo, la estrategia fue descubierta cuando los abogados Reynaldo Villalba y Miguel Ángel del Río, representantes de víctimas dentro del proceso, exigieron participar en la diligencia.
Esta acción se ha interpretado como parte de un intento más por parte de la Fiscalía de buscar una nueva preclusión del caso, marcando el quinto esfuerzo de los fiscales a cargo. La citación de Mancuso, que aparentemente pretendía presentar alguna “prueba nueva o antigua disfrazada, para que dijera que Iván Cepeda y la fallecida Piedad Córdoba fueron a verlo a una cárcel en Estados Unidos para pedirle que hablara contra Uribe”, según detalló Coronel, evidencia la complejidad y los retos que enfrenta el proceso judicial.
No obstante, la jugadita de la Fiscalía puede resultar contraproducente, pues con la solicitud de la defensa de participar en el interrogatorio junto a las víctimas se espera que Salvatore Mancuso amplíe sus declaraciones sobre la cercanía de Álvaro Uribe con el paramilitarismo.
“Al enterarnos de esa eventualidad, queremos que Salvatore Mancuso, nos manifieste cuál fue la participación exacta de Álvaro Uribe Vélez con relación a la masacre de El Aro y al asesinato de Jesús María Valle. Es decir, que esa intervención y declaración se haga de manera integral”, expuso el abogado Del Río.
En medio de estas controversias, persisten las demandas de transparencia y equidad en el proceso judicial, con la esperanza de que la justicia prevalezca sin interferencias indebidas. La ciudadanía y las partes interesadas siguen atentas al desenlace de este caso, que no solo determinará el destino de Álvaro Uribe, sino que también influirá en la credibilidad y la integridad del sistema judicial colombiano.