Este Jueves 30 de junio la Junta Directiva del Banco de la República decidió subir las tasas de interés ante la persistente inflación, este aumento corresponde a un incremento de 150 puntos que la ubica en un 7,5%.
Dicho incremento lleva la tasa a niveles que no se veían desde 2017, cuando el país tuvo el tipo de intervención más alto que alcanzó 7,75% y bajó a 7,5%, según señala El Universal.
La decisión tuvo en cuenta que el Indicador de Seguimiento a la Economía en mayo continuó expandiéndose. Así, se reafirmó una proyección del PIB de 8,5%, un alza importante frente a lo previsto (7,2%).
De acuerdo con Leonardo Villar, gerente del Banco, el principal motivo del incremento es la inflación que se mantiene creciendo mes a mes. A mayo alcanzó 9,07% y en lo corrido del año ya suma 6,55%.
Además destacó que la decisión del banco central surge porque se ha visto un exceso de demanda en medio del panorama en el que el financiamiento externo es más costoso. El efecto es que en el primer trimestre, el déficit de la cuenta corriente haya llegado a 6,4%, frente a 4,1% que se había visto en el mismo periodo del año pasado.
Villar apuntó que la intención también es evitar que esto pueda generar un recalentamiento de la economía y que “ponga en riesgo la economía ya que se generan presiones inflacionarias y se generan déficits externos”.