La alcaldesa de Bogotá, Claudia López, presentó un nuevo paquete de medidas estructurales frente a la corrupción, que incluyen la regulación del cabildeo o lobby en Bogotá y la racionalización de trámites, donde se hará especial seguimiento a los que tienen un mayor riesgo de soborno, entre otros.
Así mismo, este proyecto busca que las entidades del Distrito trabajen coordinadamente para hacer seguimiento a la información pública de su equipo de colaboradores, especialmente en el nivel directivo con relación a cambios en su patrimonio. Además, los ciudadanos conocerían quiénes hacen gestiones ante los despachos públicos y para qué.
Otra de las medidas anunciadas por la alcaldesa es que serían públicas las decisiones que se tomen en el marco de las instancias de coordinación y espacios de gobierno corporativo, sobre temas estratégicos para la ciudad. Además, los contratos tendrían cláusulas y compromisos de integridad entre los proponentes y el Distrito de no otorgar dádivas ni beneficios a los servidores.
Frente a las denuncias ciudadanas se establecerá una estrategia de protección y un mejoramiento al esquema de seguimiento, donde cada seis meses las entidades deberán dar a conocer el estado de las mismas y las acciones implementadas.