El presidente Iván Duque ordenó a la Policía levantar los bloqueos en las principales vías del país. Según el mandatario, estos levantamientos se harán dentro del estricto cumplimiento de los derechos humanos, lo cual no ha ocurrido en los procedimientos de la fuerza pública durante la protesta social.
“Hemos dado instrucciones a todos los niveles de fuerza pública para que en los territorios de Colombia, con alcaldes y gobernadores, desplieguen su máxima capacidad operacional para que dentro de la proporcionalidad y el estricto cumplimiento de los DD.HH. y su protección le permitan a todos los colombianos recuperar la movilidad, recuperar el bienestar”, expresó Duque.
El presidente explicó que esta decisión se basa en que en Colombia se permite “la protesta pacífica”, recalcando que “hay un claro interés criminal de afectar y sabotear la economía y desarrollo social de muchísimas poblaciones”
Adicionalmente, Duque afirmó que “aquí no hay dictaduras, no hay opresión. Esta es una democracia con una hoja de ruta que es nuestra Constitución y debemos hacerla valer y cumplir para el bienestar de todos los ciudadanos”.
Sin embargo, el Comité del Paro Nacional, quienes llevan dos de diálogo con el Gobierno, rechazaron que el presidente no se refiriera al uso de las armas de la fuerza pública, las detenciones arbitrarias, la reactivación del protocolo de las protestas ni la rectificación del terrorismo vandálico contra quienes han salido a protestar de forma pacífica.
Asimismo, el presidente de la CUT, Francisco Maltés consideró la decisión de Iván Duque como una “declaración de Guerra”
“Duque le declara la guerra al paro cuando ordena desplegar el máximo de sus fuerzas militares y de Policía sobre los sitio de concentración pacífica que hay en el país”, dijo Maltés.