El exvicepresidente Germán Vargas Lleras vuelve a estar en el centro de la polémica tras un incidente captado en video durante una de sus visitas en el Huila, en el marco de su regreso a la política y posibles aspiraciones para las elecciones presidenciales de 2026. En el video, que fue revelado por La Silla Vacía, se observa a Vargas Lleras lanzando un manotazo a su jefa de prensa, Yadira Buitrago, mientras ella intentaba acomodar un micrófono. Visiblemente molesto, Vargas exclamó: “¿Qué es lo que me toca?”, a lo que Buitrago respondió que solo intentaba ajustar el micrófono. Luego, Vargas agregó: “No vas a sacar eso, ¿no?”, a lo que su colaboradora respondió asegurando que el incidente no sería divulgado.
El gesto brusco de Vargas Lleras, que ocurrió durante una visita a proyectos de vivienda que él impulsó como vicepresidente, generó comparaciones con un episodio similar en 2016, cuando le dio un coscorrón a una escolta. Este incidente de hace ocho años marcó un punto de inflexión en su carrera política, reduciendo su popularidad de manera significativa. Según encuestas, la imagen favorable del líder de Cambio Radical cayó severamente, afectando sus aspiraciones presidenciales de ese entonces.
Aunque Buitrago declaró que no se sintió agredida y que no hubo un golpe, el incidente desató fuertes críticas en redes sociales, sobre todo desde sectores cercanos al gobierno de Gustavo Petro. La senadora María José Pizarro, del Pacto Histórico, compartió el video en sus redes, advirtiendo que no se debe permitir el regreso de actitudes autoritarias en la política. Otros como Camilo Romero, exgobernador de Nariño y embajador en Argentina, señalaron que el comportamiento de Vargas Lleras refleja prepotencia.
Vargas Lleras, por su parte, aseguró que el gesto no fue un manotazo violento y explicó que habla con vehemencia y utiliza mucho las manos al expresarse. Sin embargo, este nuevo episodio parece poner en duda los esfuerzos que ha hecho en los últimos años por suavizar su imagen, como cuando comenzó a grabar comerciales niños con, abrir una cuenta de Instagram para su perro y mostrarse en conciertos.
El incidente ocurre en un momento en el que Vargas Lleras está retomando protagonismo en la política nacional, liderando la bancada de oposición de Cambio Radical y evaluando si se presentará como candidato en 2026. Aunque aún no ha decidido si competirá, ha señalado que lo hará solo si percibe un ambiente favorable a nivel nacional.
Este nuevo episodio no solo revive viejas críticas, sino que podría tener un impacto negativo en sus planos políticos a futuro, en un contexto donde la opinión pública es cada vez más sensible a actitudes que puedan interpretarse como autoritarias o violentas.