En una sorpresiva decisión, la Sociedad de Activos Especiales (SAE) ha expulsado a Antonio Bustos Sánchez de su cargo como delegado de la entidad. Este movimiento surge tras la negativa de Bustos Sánchez a entregar la lujosa finca La América, perteneciente al paramilitar Hugues Manuel Rodríguez, alias “Comandante Barbie”, a las víctimas del paramilitarismo.
La W reveló en una investigación que Bustos Sánchez, en su calidad de representante de la SAE, se opuso a la entrega del predio a las víctimas, defendiendo el patrimonio del “Comandante Barbie”, por tal razón, Sebastián Caballero, vicepresidente de la SAE, anunció la remoción de Bustos Sánchez y señaló que se evalúan posibles delitos en su actuación.
La posición de la SAE ha sido clara: defienden los intereses de la entidad y no protegen a paramilitares. Caballero expresó un “absoluto rechazo” hacia la conducta de Bustos Sánchez y anunció la evaluación de posibles acciones legales, incluido el fraude a resolución judicial.
“La Posición de la SAE es de absoluto y rotundo rechazo a esto que ha sucedido. La SAE administra cerca de 2.800 empresas (…) afortunadamente nos hemos enterado a través de los medios de comunicación de esto que consideramos que es un exabrupto, que es una canallada, que se hace por medio del representante legal” afirmó el vicepresidente de la SAE.
En contexto, la controversia gira en torno a la finca La América, avaluada en $28.000 millones, que debería entregarse a las víctimas del paramilitarismo según lo establecido por la ley. Bustos Sánchez, inicialmente designado como depositario del predio, cambió su postura y se opuso férreamente a la entrega del bien.
Por ahora, se espera que la expulsión de Bustos Sánchez represente un paso importante hacia la garantía de los derechos de las víctimas y la justicia en Colombia. La SAE reiteró su compromiso de administrar los activos del Estado con integridad y transparencia, velando siempre por los intereses de la sociedad.