Por Gilberto Valencia
@Gilbertopina24
Petróleos de Venezuela S.A., es una de las empresas con más capacidad productiva de gas en Colombia y está a punto de desaparecer, se desconoce el paradero de su representante legal y hace dos años no les pagan a sus empleados en Colombia.
A pesar de que esto se ha puesto en conocimiento del Gobierno Nacional y del Ministerio del Trabajo, los entes han hecho caso omiso a las denuncias, como lo narran Diana Jaimes, líder de planificación, control y gestión de PDVSA en Colombia, y Gregorio Mejía, presidente de la USO, Unión Sindical Obrera, el principal sindicato de Ecopetrol, la estatal colombiana.
Jaimes recuerda el proceso que han hecho desde que empezaron los bloqueos a la empresa en agosto de 2017: “Hicimos el procedimiento tal y como establece la ley, fuimos al Ministerio del Trabajo en mayo y pusimos una querella los 17 trabajadores que había hasta el momento, el representante legal de la sucursal no asistió, en junio decidimos hacer una segunda denuncia ante el ministerio del trabajo para que hiciera las sanciones correspondientes, sin embargo, no nos han dado solución”.
Ambos entrevistados coincidieron en afirmar que en “ninguna parte nos apoya en esta situación, lo que queremos es que nos solucionen el tema laboral, además hay un sin número de trabajadores colombianos afectados y Ecopetrol es quien debería asumir esta situación como empresa estatal pagando todas las acreencias que tiene”.
La USO ha hecho gestión y acompañamiento a trabajadores y sindicalistas de PDVSA, por ello convocó el día lunes 5 de marzo una rueda de prensa en el centro de Bogotá. Allí se hizo un llamado de atención a las autoridades gubernamentales para que atienda sus denuncias y brinde garantías a sus trabajadores, por parte del presidente de la USO, en concordancia con Jaimes funcionaria de la sede petrolera en Colombia, quien además solicitó prontas garantías en salud.
Según lo denunciado por el presidente de la USO Gregorio Mejía, por orden del gobierno estadounidense, se le realizaron bloqueos económicos a la empresa venezolana en convenio con entidades bancarias colombianas, que han interrumpido el flujo económico de la entidad. “Nosotros en la USO tuvimos acceso a una información, enviada por un banco que manejaba las cuentas de PDVSA, donde dice que a pesar de que no están bloqueadas las cuentas, para ellos es más importante mantener su relación con U.S.A. que con la empresa venezolana y por eso no le permiten monetizar en Colombia”.
De igual forma Diana Jaimes puntualizó que “por una situación política, estamos resultando afectados, a pesar que tenemos un contrato, deberíamos tener unas garantías a nivel laboral y estamos invisibilizados, nadie habla del tema, por eso decidimos realizar esta rueda de prensa”.
“Quedamos en medio de una negligencia, tanto por parte colombiana, como de algunos funcionarios de venezolanos, particularmente yo tengo un contrato por término indefinido. Muchos compañeros han renunciado por causas imputables al patrón, ¿porqué nosotros no renunciamos? porque si renunciábamos íbamos a tener que hacer otros procedimientos y una demanda que tarda mucho tiempo y decidimos permanecer vinculados, para que el ministerio de trabajo nos apoyara”, manifestó la líder sindical.
La funcionaria de la sucursal piensa que “las entidades bancarias colombianas siguen una directriz con sanciones para bloquear las cuentas bancarias de PDVSA sucursal Colombia y eso fue lo que no permitió que llegaran recursos enviados desde la casa matriz que se transfirieron, para continuar con la operatividad de la sucursal”.
Esta problemática es denunciada en un momento coyuntural para el país en el que se han dado especulaciones y se ha generado un debate político desde los diferentes partidos ante la opinión, por ello citó las palabras de Mejía:
“Es importante también tener en cuenta que este es un tema geopolítico, estratégico para Estados Unidos, el tema es el petróleo, hace años también lo hicieron en Cuba, esta es la estrategia que le están implementando hoy a Venezuela, porque necesitan el petróleo venezolano, recordemos que la receta de Venezuela, cambio ostensiblemente desde el momento que llegó Hugo Chávez a la Presidencia de Venezuela, cuando redujo la venta de petróleos a USA y empezó a impulsar esta empresa hacia otros países. En Venezuela se producían 4 millones de barriles y le bajo a 2 y medio, actualmente hay una producción mucho más baja en Venezuela, lo hemos constatado como sindicato y ya no llega ni al millón de Barriles y no porque no tenga el petróleo, sino por la falta de mantenimiento en algunas zonas, ha impedido que la producción crezca, sabemos que hay políticas del gobierno de Maduro, para reforzar la producción y recobrar las cifras anteriores”.
“Es mucho más barato llevar el petróleo venezolano a U.S.A. que llevarlo desde medio oriente”, agregó Mejía.
El principal conducto que transporta el gas, atraviesa La Guajira, así como a 121 comunidades Wayúu que hoy se encuentran en peligro, como consecuencia de la parálisis de este gasoducto, así lo denunciaron ambos entrevistados.
Esta situación repercute directamente la economía colombiana, pues empresas como la fertilizante Monómeros con sede en Barranquilla, podría ser intervenida próximamente por petición de funcionarios estadounidenses. Esta empresa genera al menos 800 empleos directos y sus productos llegan a más de 3 millones de campesinos en el país
Es preciso recalcar el traslado de la sede Europea de PDVSA a Moscú por parte del presidente de Venezuela Nicolás Maduro hace 5 días, esta empresa ha sido ubicada en la lista Global 500 de la revista fortune, en el puesto 39 entre las empresas más grandes del mundo sobre la base de sus ingresos, siendo la segunda en la región de Latinoamérica.
El gasoducto en cuestión atraviesa toda la geografía colombiana y tiene capacidad para movilizar 400 millones de pies cúbicos diarios, en Colombia la capacidad total es de mil millones diarios, es decir que esta producción pudiese suministrar 40% del gas que se consume en Colombia, explicó Diana Jaimes.
De esta forma concluyó la rueda de prensa con este llamado de atención por parte del presidente de la USO: “están pensando en quedarse con el gasoducto empresas privadas y también hacemos un llamado al gobierno, porque tiene que quedar es en manos de la nación no de un privado, algunas empresas como Promigas y (TGI) Transportadora de Gas Internacional, se quieren apropiar del único gasoducto que atraviesa la zona norte de Colombia hasta la Guajira, por donde transita el gas, pero que carece del servicio domiciliario”.