Un grupo de investigadores del Instituto Francis Crick de Londres expuso recientemente un estudio que comprueba que más que causar daños, la contaminación del aire despierta células viejas y dañadas que producen cáncer.
De acuerdo con un artículo publicado por la BBC, uno de cada 10 casos que desarrollan cáncer de pulmón en Reino Unido se debe a la contaminación del aire.
Según el artículo, los investigadores se centraron en una forma de contaminación llamada materia particulada 2.5 (conocida como PM2.5), que es mucho más pequeña que el diámetro de un cabello humano.
A partir del estudio encontraron que, en los lugares con niveles más altos de contaminación del aire tenían más cánceres de pulmón no causados por fumar, así, alrededor de una de cada 600.000 células en los pulmones de una persona de 50 años ya contiene mutaciones potencialmente cancerosas, “estas se adquieren a medida que envejecemos, pero parecen completamente sanas hasta que son activadas por la alarma química y se vuelven cancerosas”, detalla la investigación.
Lo más interesante del estudio es que con los resultados obtenidos se llevaría a una “nueva era” de prevención molecular del cáncer y en especial “una comprensión mucho mejor de las fuerzas impulsoras detrás del cáncer de pulmón”.