domingo, noviembre 3

MinEducación Alejandro Gaviria planteó varios interrogantes a la reforma a la Salud 

Por medio de un documento de cuatro páginas, el ministro de Educación Alejandro presentó varias preocupaciones sobre la reforma a la salud que adelanta su homóloga, la ministra Carolina Corcho

En primer medida, Gaviria señaló que la reforma a la salud no ha hecho una evaluación de lo que funciona y no funciona del sector, ni de la infraestructura instalada, como tampoco de la heterogeneidad de las condiciones de los territorios 

“El diagnóstico no es claro. Pareciera insinuar que todos, o la mayoría de los problemas se originan en la administración (privada o no pública) del sistema. Como si eliminar las EPS fuera una solución a los problemas de insostenibilidad financiera, corrupción y desigualdades territoriales”, señala el ministro en el comunicado.

Para el jefe de cartera educativa, quien estuvo a cargo del ministerio de Salud por 6 años en gobiernos anteriores, “hay mucho que conservar del sistema actual. Casi todos los hogares colombianos están protegidos: una enfermedad no implica la quiebra familiar, ni obliga a la liquidación de activos. Un puñado de hospitales del país están entre los mejores de la región. Los sistemas de información se han sofisticado como resultado de décadas de trabajo. El manejo de enfermedades crónicas es ejemplar. En los mejores hospitales los trabajos se atienden personas de todos los orígenes socioeconómicos. En fin, el sistema actual es producto de 30 años de innovación y trabajo colectivo”.

Una de las principales críticas que planteó Gaviria en su documento es el papel que llegaría a cumplir el Sistema General de Seguridad Social en Salud (Adres) al convertirse en un pagador único, ante lo que aseguró que se volvería una gran EPS. “La experiencia en Colombia con pagadores únicos públicos ha sido desastrosa“, puntualizó el ministro. 

Si bien el ministro reconoció la necesidad de una reforma a la salud y resaltó el énfasis en la atención primaria y  reivindicación del talento humano, que plantea la iniciativa de Corcho, insistió que sin un diagnóstico claro la reforma propuesta “puede hacer daño”.

A lo largo del documento, el ministro de Educación cuestionó varios de los cambios estructurales que plantea lo que hasta el momento se conoce del proyecto de ley que se tramitará en sesiones extra del Congreso

Entre los interrogantes que presentó están los siguientes:

  • ¿Quién va a coordinar la atención domiciliaria, las enfermeras en casa y las entregas de miles de balas de oxígeno?
  • ¿Quién va a encargarse de la coordinación farmacéutica, de la coordinación para la entrega de medicamentos, de los sistemas de información y de la negociación con la industria?
  • ¿Quién va a hacer la gestión de riesgo? Por ejemplo, el control de pacientes con enfermedades crónicas como hipertensión y diabetes.
  • ¿Pasarán los 110.000 empleados de las EPS a ser funcionarios públicos? ¿Quedarán los pacientes a la deriva?

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