Por EFE
Miles de mexicanos hacen colas kilométricas buscando una oportunidad de empleo en la construcción de la nueva refinería de Dos Bocas, impulsada por el presidente Andrés Manuel López Obrador, en el estado suroriental de Tabasco.
Familias enteras con niños en brazos y cargadas de equipaje, en su mayoría provenientes de otros estados mexicanos, acampan desde el domingo para lograr ser los primeros en alcanzar una solicitud de trabajo, el primer paso para la obtención del empleo.
Bajo la lluvia y el sol, los aspirantes a un puesto esperaron más de 16 horas para la entrega de documentos, que se prolongó hasta la tarde de este lunes.
Las autoridades federales y estatales del gobierno mexicano anunciaron en redes sociales hace una semana la contratación de hasta 20.000 personas para profesiones como soldadores, electricistas, mecánicos, ingenieros y personal especializado.
Para el ingeniero industrial Victorico Cruz, desempleado desde hace ocho meses y quien busca el puesto de supervisor de obras, la nueva refinería supone la reactivación laboral del sureste del país.
“Venimos de las Choapas, Veracruz, aproximadamente a tres horas de distancia. Somos más de 50 compañeros que nos organizamos para llegar. Las esperanzas son muchas no solo en el ámbito laboral, sino que va hacer la reactivación laboral para el sureste de la República”, dijo a Efe.
Tal y como constató Efe, la fila de personas desempleadas llegó a tener hasta cuatro kilómetros de largo, desde el parque de feria Tabasco hasta la población cercana de Bosques de Saloya.
López Obrador indicó que, con esta primera etapa de construcción -de seis- se da “el inicio de la Cuarta Transformación nacional”, sin más dependencia energética del extranjero.