Con el fin de reconstruir el tejido social y favorecer la inclusión social de mujeres cabeza de hogar en estado de marginalidad y reclusión, al menos 5000 condenadas tendrán la oportunidad de sustituir su pena con servicios de utilidad pública no remunerados, en diferentes actividades que aporten positivamente a la sociedad.
Por medio de la sanción de la Ley ‘mujeres cabeza de familia en materia de política criminal y penitenciaria’, el presidente Gustavo Petro puso en marcha un proyecto que promovió desde que era senador de la República, el cual permite que las mujeres que enfrentan condenas por delitos menores como hurto y/o tráfico de estupefacientes con penas inferiores a 8 años de prisión puedan trabajar en proyectos sociales no remunerados.
“Con esta ley que hoy firmo y por la cual voté afirmativamente como senador, se liberan 5.000 presas madres cabeza de familia para cuidar a sus hijos durante 5 días cada semana.”, anunció en su cuenta de Twitter.
En ese sentido, quienes apliquen para este beneficio podrán pagar su condena a través de actividades educativas, restauración ambiental, recuperación del espacio público, apoyo al transporte masivo y ayuda a poblaciones vulnerables, entre otras.
Además, la norma sancionada este miércoles permite que las beneficiarias no solo tengan la oportunidad de trabajar, sino también de suplir las necesidades de sus hijos, además de estudiar y desplazarse sin restricciones mientras están cobijadas por la medida.
Así las cosas, las mujeres cobijadas por la ley deberán cumplir con una intensidad mínima de 5 horas semanales y máximo 20 horas semanales.
Por ahora, el Ministerio de Justicia adelanta la reglamentación de la Ley para que las mujeres que cumplan los requisitos puedan acceder lo más pronto posible a esta medida alternativa, reglamentación que debe estar definida en menos de 6 meses.