La familia de Germán Darío Flores, pudo darle una sepultura digna y un cierre a un proceso doloroso, su madre libró una lucha de casi 40 años, hasta que lo encontraron gracias a la rendición de verdad de un compareciente, exmiembro de la fuerza pública.
Para dar con el cuerpo, fue clave la declaración de un exsoldado, que perteneció al entonces Batallón de Contraguerrilla 79, quien brindó la ubicación exacta de donde se encontraba el cuerpo, ubicado en el cementerio de las Mercedes, denominada como la fosa común número 20.
Su madre María Mercedes Jiménez, estuvo liderando una incansable búsqueda, con el fin de dar con el paradero de su hijo, quien salió de su casa en Medellín, en busca de mejores oportunidades laborales y nunca regresó, hoy su madre, después de 40 años supo lo que le pasó y pudo darle una sepultura digna a su hijo.
“Hoy cerramos por fin esta etapa de dolor y de incertidumbre. Ya tenemos la certeza de dónde está nuestro hermano”, dijo Hilda Flórez, con quien Germán Darío jugaba fútbol durante la infancia.
El magistrado, Alejandro Ramelli, manifestó “A pesar de la natural tristeza, sonreímos al ver que esta linda familia recibe unida y en amor al hijo, hermano y tío responsable. German Darío era serio, educado, galán y reservado”.
El cuerpo de Germán reposa hoy, en el mausoleo “Ausencias que se Nombran”, un espacio dedicado especialmente a las víctimas del conflicto armado.
Germán nunca se dejó cortar el pelo más que de su madre y de él mismo. Su peinilla y su camisa acompañaron su urna durante la misa en el Seminario Pasionista Santa Cruz, de Medellín. pic.twitter.com/0OZnN01HwP
— Jurisdicción Especial para la Paz (@JEP_Colombia) May 13, 2022
“A pesar de la natural tristeza, sonreímos al ver que esta linda familia reciba unida y en amor al hijo, hermano y tío responsable. German Darío era serio, educado, galán y reservado”, dijo el magistrado Alejandro Ramelli, co-relator del #Caso03. pic.twitter.com/CaHwzwEzCz
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