Fue una masacre policial, que cobró las vidas de once jóvenes, es la conclusión informe independiente que solicitó la alcaldía de Bogotá, con apoyo de Naciones Unidas, para esclarecer lo que ocurrió en la capital las noches del 9 y 10 de septiembre de 2020.
Según el informe, esa noche, tras el asesinato de Javier Ordóñez a manos de agentes de la Policía, “se desencadenó uno de los episodios más graves de violencia a los derechos humanos acontecidos en la historia de la ciudad de Bogotá”.
Y, que dejó como resultado, 14 asesinatos, 75 personas heridas con arma de fuego, 43 con arma cortopunzante, 187 con otro tipo de elementos. Además, 216 miembros de la Policía Nacional resultaron heridos.
Precisamente, el informe es el resultado de una investigación académica y extrajudicial, liderada por el exdefensor del Pueblo Carlos Negret, y que deja en evidencia, lo ocurrido en las noches del 9 y 10 de septiembre de 2020.
Allí, se señala que esa noche se cometieron varias prácticas violentas, entre las que se encuentran: detenciones arbitrarias, estigmatización de la protesta social, uso ilícito de la fuerza, impunidad y violencia contra la Fuerza Pública.
Aquí puede consultar el documento completo: