Por Germán Navas Talero y Pablo Ceballos Navas
Hay personas tan estúpidas, que no saben de qué está rellena la cabeza del pulpo.
El sábado en horas de la tarde estalló la bomba de la piñata verde. Cuando menos lo esperaban los que andan buscando puestos en el Distrito, su gran ‘palanca’, Angélica Lozano, renunció a formar parte del combo verde, les mandó los trastos a sus compañeros políticos y se fue, se fue, y se fue; y ahora dicen “se va, se va la barca, se va con la pescadora, y en esa barca que cruza el mar, sea va, se va la senadora”.
¿Que por qué se fue? Chismes van, chismes vienen. Los que saben de política –y esos no somos nosotros– aseguran que no soportó la derrota que le propinarían en elecciones sus mismos compañeros, como Inti Asprilla (@intiasprilla) y Katherine Miranda (@MirandaBogota). La prensa quería averiguar chismes pero los posibles informantes no querían hablar. Pero no falta el infidente que nos contó que fue por culillo que la senadora se fue para que no los pudieran contar en marzo.
Obviamente que de ese tuti-fruti que son los verdes no se puede negar que Inti y Katherine son excelentes ejemplares de una buena política. En plenarias de Cámara se distinguen por su verraquera y franqueza. Eso dice el común de la gente, y eso tenía asustados a los claudistas, y por eso se reventó la piñata antes del primer palazo.
Sabemos que esa olla –llena de dulces y moneditas, cual piñata– hay que romperla a los golpes; y obviamente, Katherine e Inti, estaban prestos a darle sus buenos palazos en las elecciones de marzo.
¡Bien porque los que rompieron la olla!
Otros que están echando humo, pero que no han sido capaces de estallar, son los seguidores del ex-presidente o ex-presidiario, quienes no aceptan que las listas de su partido vayan a ser encabezadas por el peor Secretario de Gobierno que haya tenido Bogotá: el señor Miguel Uribe Turbay (@MiguelUribeT). Un lector nuestro del CD, hincha furibundo de nuestras letras, nos decía que eso había sido un patadón que les había dado Uribe en el trasero a todos aquellos que le habían servido de patitas y manitos en el momento de la despedida. Razón tendrán algunos para decir que con ese peñalosista encabezando la lista del Centro Democrático (CD) tendrán menos votos que los que podrá tener Peñalosa si es que definitivamente aspira a la Presidencia de la República.
Colombia es de malas, porque se soportó un presidente como Uribe, tiene que padecer ahora a un Duque, y ahora la campaña de Peñalosa. ¿Qué diabluras habrán hecho nuestros antepasados para que el Dios de los católicos los castigue tan duro?
Una cosa sabemos de la otra vida, y es que San Pedro dijo que ni pu’el chiras recibiría peñalosistas en el cielo –y mucho menos a Peñalosa–; en tanto que Satanás, desde el Averno, jura que le pondrá tres llaves al infierno para que ninguno de estos pueda entrar allá. Que se consuman de por vida –o de por muerte– en el purgatorio.
Esperemos a ver qué pasa, en todo caso sentimos que los del CD tengan que soportarse a un Miguel Uribe Turbay como cabeza de su lista. Y es entonces cuando recordamos que el pulpo tiene su cabeza llena de intestinos, y es el depósito de los excrementos. Es decir, en la cabeza de pulpo –que, en este caso, es la cabeza de una lista– solo se encontrarán los desechos humanos que ya sabemos qué nombres tan feos tienen.
Esperamos que por decir las cosas que decimos ‘Lorduy-Char’ no nos vaya a aplicar el silencio carcelario que, en un acto de zalamería, a connivencia de las mayorías de Cámara, y para congraciarse con su jefe Char, quiere sepultar en chirona hasta por 10 años a quienes se atrevan a calumniar o injuriar a esos prohombres (servidores públicos) que rigen los destinos de este país.
Nos dicen que Lorduy ha estado llamando a los infiernos para que Satanás le preste un calabocito con calefacción para introducir allí a todos aquellos que hablen mal de los amigos del gobierno, y aún del mismo presidente. Es obvio que esos congresistas que han aplaudido el carcelazo para quienes se atrevan a opinar, están esperando a ver si callan a Navas Talero y a Ceballos Navas para que dejen de contar todos los chismes que a ellos les llegan.
Precisemos tres conceptos para que los analfabetas del Congreso entiendan:
Calumnia: Imputación de un hecho delictual falso.
Injuria: Imputación de un hecho deshonroso.
Chisme: No es más que la verdad, pero con exceso de adornos.
Por ejemplo: Decir que en el Congreso la mayoría son vagos, sería injurioso, porque el hecho es cierto pero ofensivo. Si quieren más explicaciones, los invitamos a un curso de Derecho Penal, y allí, con muñequitos de plastilina, les explicaremos la diferencia entre unos y otros.
También como chisme supimos que en el momento de conciliar ‘la mordaza Lorduy’ los conciliadores rechazarán este articulito. –Ya explicamos que chisme es la verdad con exceso de adornos–. Acuérdense que estamos echándoles un chisme. Los conciliadores sepultarán el tentáculo de ‘el pulpo Lorduy’.
A este país, que le importa un pepino los seis mil y pucho de falsos positivos, lo tiene muy preocupado el amañe del partido de los llaneros contra un equipo de la costa, y han pedido, eso sí, investigaciones exhaustivas y de inmediato. Por eso el señor fiscal –que no tiene homicidios por investigar ni desapariciones forzadas– ha puesto a marchas forzadas a uno de esos de sus fiscales delegados para que, en providencia de por lo menos quinientos folios, meta a alguien a la cárcel con la afirmación de que no hubo gol, y con esta atestación queda muy en alto el nombre del equipo que, como cualquier prepago, estaba entregando su portería para que le metieran –no aquello– sino un golazo.
El fiscal Francisco Barbosa está muy contento con la celeridad de estas investigaciones que tranquilizan al país y en su próxima rueda de prensa explicará la importancia del var en los partidos de fútbol para evitar las trampas. Los falsos positivos no son problema de él. Para él eso no tiene importancia, el gol, sí.
–Y no podía faltar nuestra alusión a Bogotá–. La ciudad está hecha una melodía gracias a la improvisación y a las estupideces del Instituto de Desbarajuste Urbano (IDU), trabajando en llave con el Instituto de Derroche Urbano (también IDU). No sabemos cuántos miles de millones de pesos se habrán tirado poniendo postecitos y pintando rayas azules para que tres o cuatro desocupados transiten por las congestionadas calles de Bogotá so pretexto de que esas son ciclo-vías.
Y sobre la inseguridad…
Que alguien como Fajardo critique la situación de Bogotá, es porque ya tocamos fondo.
Recomendado: Ahora sí –y gracias al periodista Akerman (@yohirakerman)– entendemos por qué van a premiar a Miguel Uribe Turbay con la cabeza de lista al Senado. Y es que, a decir verdad, es mucho lo que el innombrable le debe a su abuelito. Si no leyó la columna de Akerman del pasado fin de semana, aquí se la enlazamos, para que también lo entienda.
Por todo esto nuestro periodista Francisco Cristancho (@FACristancho) recomienda, que no creamos ni en promesas de políticos ni en las de prepagos.