María Victoria Fallón, representante de las víctimas de las masacres del Aro y La Granja, reveló que el próximo 30 de noviembre se llevará a cabo un acto de reconocimiento en Medellín, en donde el Estado Colombiano pedirá perdón por su responsabilidad en estas matanzas perpetradas por paramilitares.
Según fue confirmado por la representante, este acto de reconocimiento y perdón se llevará a cabo en la ciudad de la eterna primavera, en ese sentido, se cumplirá la orden proferida hace 16 años por la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte IDH) que condenó al Estado por esas dos masacres.
De acuerdo como fue señalado por Fallón en su cuenta de Twitter “diez y seis años desde que la @CorteIDH lo ordenó tuvieron que esperar las víctimas y familiares de las masacres de La Granja y El Aro (Ituango) para que un Presidente de la República tuviera la entereza de aceptar responsabilidad y pedir perdón por los criminales hechos”.
A su vez agregó, que durante el acto de reconocimiento el presidente Gustavo Petro será quien presida la ceremonia, según la defensora “dará la cara en nombre del Estado y pedirá perdón a las víctimas por los hechos en los que participaron agentes del Estado en connivencia con paramilitares en 1996 y 1997”.
Por ultimo, Fallón lamentó que varios familiares de las victimas no estuvieran presentes en este acto, ya que muchos murieron años más tarde sin escuchar ninguna palabra que aliviara la pena y el vacío que les dejó el asesinato de sus seres queridos.
De acuerdo con Rutas de Conflicto, la masacre del Aro fue perpetrada desde el 22 hasta el 31 de octubre de 1997 en el corregimiento del Aro, ubicado en el municipio de Ituango, hombres fuertemente armados de las Autodefensas Campesinas de Córdoba y tropas del DAS, llegaron a este sector y con listas en mano, acusaron a 12 pobladores de la región de pertenecer a la guerrilla, los torturaron y asesinaron.
Un caso similar se vivió en el corregimiento de La Granja el 11 de junio de 1996, alrededor de 30 integrantes de las Autodefensas llegaron a esta región ubicada en Ituango y asesinaron a 5 personas que acusaban de auxiliar a la guerrilla, posteriormente la Fiscalía determinó, que ninguna de esas personas pertenecían a la agrupación subversiva, se trataba de líderes sindicales de la zona.