Por AFP
Estados Unidos dijo el jueves que respeta la decisión de la Corte Suprema de Colombia de dejar en libertad a uno de los exjefes de la disuelta guerrilla FARC, Jesús Santrich, requerido por las autoridades estadounidenses bajo sospecha de narcotráfico.
“Respetamos la decisión del tribunal”, dijo en rueda de prensa la portavoz del Departamento de Estado, Morgan Ortagus.
En una aclaración posterior, el Departamento de Estado dijo que la decisión del 29 de mayo del máximo tribunal de justicia colombiana “no afecta la solicitud de extradición de Estados Unidos, sino que remite a los esfuerzos de procesamiento dentro de Colombia”.
Seusis Paucias Hernández, más conocido como Jesús Santrich, fue implicado en una supuesta conspiración para enviar 10 toneladas de cocaína a territorio estadounidense después de la firma del histórico acuerdo de paz a fines de noviembre de 2016.
El excomandante guerrillero, que siempre ha proclamado su inocencia, fue excarcelado este jueves luego de que la Corte Suprema de Justicia colombiana ordenara el miércoles su libertad “inmediata” al reconocerle fuero como congresista del partido que surgió del pacto de paz.
El máximo tribunal asumió la investigación en contra de Santrich por considerar que es la única corte competente para indagarlo. El exjefe guerrillero nunca pudo ocupar su escaño en el Congreso por haber sido capturado en abril de 2018 con fines de extradición a Estados Unidos.
Ortagus había señalado inicialmente que Estados Unidos veía “lamentable” la decisión de la Corte Suprema.
Pero luego de la rueda de prensa, el Departamento de Estado dijo que esa apreciación de Ortagus aludía a una decisión de hace dos semanas de la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP), el órgano de justicia transicional surgido del acuerdo de paz para juzgar los peores delitos en el marco del conflicto armado cometidos antes de la entrada en vigencia del acuerdo de paz.
El 15 de mayo, la JEP frenó la extradición de Santrich por considerar que las pruebas remitidas por la fiscalía colombiana no permitían establecer la comisión del supuesto delito y que Estados Unidos no había enviado la presunta evidencia en contra del exjefe guerrillero.
El Departamento de Estado dijo que la portavoz se refirió a esa decisión, “que Estados Unidos consideró lamentable y que actualmente está en apelación”.
“Estados Unidos cumplió con los requisitos de extradición establecidos con Colombia, y nuestra solicitud estableció que los delitos por los que se acusó al señor Santrich tuvieron lugar después del 1 de diciembre de 2016”, declaró este jueves Ortagus, destacando que los cargos en contra del exjefe guerrillero “son muy graves”.
El caso Santrich ha provocado un revuelo político y jurídico en Colombia, profundamente dividida por el pacto de paz.