Hace algunos días se conoció de la captura y liberación del teniente coronel, Jorge Esteban Bautista López, este hecho encendió las alarmas por la presunta existencia de una red de tráfico de armas dentro de las Fuerzas Armadas, el material bélico iría destinado para abastecer grupos criminales como El clan del Golfo, ELN y las disidencias de las Farc.
Entre tanto, El Tiempo y Caracol expusieron el modus operandi de esta presunta red de tráfico, en ese sentido, algunos de los uniformados usarían su posición dentro de la institución para lucrarse de delitos relacionadas a la comercialización de armas.
Teniendo en cuenta las interceptaciones reveladas por la cadena radial, determinaron que usaban lenguaje determinado para pasar desapercibidos, usaban los nombres de algunas empresas belleza, por ejemplo, “Yanbal” para referirse a armas y municiones.
Por su parte, el fiscal encargado del caso señaló “para hacer un negocio privado con el objetivo de tener un negocio fácil. Todo ese material bélico, de guerra que solo puede y está autorizado por la Constitución Nacional, solamente los puede disponer el Ejército Nacional, usted se dedicó a venderlos al mejor postor que son los que luego los venden a los grandes grupos armados de este país que con estas armas cometen tantos delitos día a día“.
De acuerdo con Infobae, hasta la fecha van 12 uniformados capturados por hechos relacionados, según fue señaló por el diario antes citado, al menos habrían 8 batallones que han sido víctimas de extracciones de material bélico, que se supone que es de uso oficial de las Fuerzas Armadas.
Según el diario, se habla de esta ejecución de delitos como este en estaciones militares ubicadas en Caquetá, Putumayo, Meta, Tolima, Cesar, Soacha e incluso en el abastecimiento del Cantón Norte.