El expresidente Álvaro Uribe es uno de los hombres más investigados en Colombia. Con el nuevo proceso que abrió la Corte Suprema de Justicia en su contra, esta vez por las interceptaciones ilegales a por lo menos 130 personas, el expresidente suma 29 investigaciones que reposan en los archivos del Alto Tribunal.
El escándalo por los ‘perfilamientos” ilegales de la inteligencia militar a periodistas, políticos de oposición y defensores de derechos humanos, que reveló revista Semana, abrió otro capítulo en el expediente del líder del Centro Democrático.
Un correo anónimo que llegó a la Sala Especial de Instrucción de la Corte Suprema de Justicia, fue la clave para que la máxima instancia judicial abriera una investigación preliminar contra el expresidente. La información lo señala de ser el presunto beneficiario de la información recolectada por el espionaje militar.
Con este nuevo proceso se revive la polémica que desde hace 25 años enreda al senador Uribe. Una trayectoria política envuelta por investigaciones penales por corrupción, paramilitarismo, narcotráfico, entre otros. Los cuales pudiera imputarse como delitos, de contar con pruebas que así lo respalden. Sin embargo, esto no ha ocurrido por ahora.
A lo largo de su carrera política, son más de 200 procesos en que los ha sido involucrado de manera directo. De las cual 85 siguen abiertos, sin ningún tipo de condena. En la Comisión de Acusaciones de Cámara de Representantes reposan 56 denuncias y bajo la jurisdicción de la Corte Suprema de hay 29 investigaciones abiertas en contra del senador.
Solamente entre 2002 y 2010, años en los que Uribe Vélez estuvo en la Casa de Nariño, 186 acusaciones se presentaron contra suya por la presunta comisión de varias ilegalidades.
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Entre las investigaciones más sonadas contra Uribe, se encuentra las masacres en las localidades de El Aro, La Granja y San Roque. Los hechos fueron atribuidos Autodefensas Unidas de Colombia, radicado en Antioquia, en momentos en que Uribe era el gobernador del departamento.
En 2008, varios paramilitares aseguraron que el expediente tenía conocimiento y participación en la planeación de esos hechos. Entre ellos, el paramilitar Salvatore Mancuso, uno de los protagonistas más despiadados de la guerra en Colombia.
Otras de las investigaciones con mayor relevancia en su historia son: la supuesta participación en la conformación del grupo paramilitar los Doce Apóstoles, las interceptaciones ilegales ejecutadas por el extinto DAS, la denominada ‘YidisPolítica’, el caso del hacker Andrés Sepúlveda y otros delitos por injuria y calumnia.
En todos estos casos han sido condenados hombres muy cercanos al expresidente; sin embargo, el común denominar de todos los procesos es que la justicia no ha llegado muy lejos. La mayoría se encuentra sin un avance importante.
Solamente uno de todos los casos que se achacan a Uribe Vélez ha llegado hasta la fase de indagatoria, etapa previa a la acusación formal. Se trate de una investigación penal en la Corte Suprema por presunto fraude procesal y soborno de testigos.
Curiosamente, Uribe es investigado por un caso que él mismo inició. Fue víctima de sus propios señalamientos, cuando acusó ante la justicia al senador del partido Polo Democrático, Iván Cepeda, de buscar a exparamilitares en las cárceles para supuestamente usarlos como falsos testigos y que declararan en su contra.
El magistrado José Luis Barceló no encontró méritos, archivó la denuncia y decidió darle un giro de 180 grados al caso al iniciar uno nuevo contra Uribe porque consideró que había pruebas suficientes para abrir una investigación al expresidente.
Por el momento la investigación está en curso a la espera de una decisión de la Corte Suprema.